Los hombres y el bingo: cómo incluir a nuestros esposos
Ya sea en la práctica online por Internet, o en la práctica en casinos y salones de bingo especializados, la actividad es una de esparcimiento y relajación, sin mencionar, también de diversión. Y a todas nos ocurre que aquellos de lo que disfrutamos, aquello que nos entretiene y nos ayuda a relajarnos, queremos luego compartirlo con nuestros seres más queridos. Y nuestros esposos son, generalmente, a quienes queremos involucrar en este mundo de entretenimiento y disfrute, aunque a veces cueste un poco convencerlos a ello.
Hay muchas formas de incentivar a nuestros esposos a la práctica del bingo. En primer lugar, debemos explicarles que el juego no es para abuelitas n las tardes de domingo: debemos demostrarles que hoy se practican torneos y campeonatos que mezclan a las distintas generaciones, y que la práctica ha sido acogida por grandes, adultos, jóvenes y niños por igual. Y, para ello, la versión virtual del juego del bingo es ideal.
Ya que podemos jugar al bingo desde la tranquilidad de nuestro hogar, podemos elegir el momento más adecuado para introducir a nuestros esposos a su exploración. Podemos elegir algún sitio web cuyo diseño sea del agrado de nuestro marido, y servir una copa de vino extra, preguntándole si desea acompañarte. Mediante van pasando las rondas de juego, podemos incluso hacernos las distraídas y no marcar alguno de los números cantados, para que él sea quien “lo descubra” y se sienta parte importante del juego.
También, por qué no, podemos iniciar una ronda y excusarnos para ir al tocador, solicitando a nuestro esposo que custodie nuestro cartón virtual por unos minutos. Ya verás que en muy poco tiempo, tu marido te acompañará a la práctica del juego con gran gusto.
Convencerlo de asistir a los salones de bingo es una cosa muy diferente. Es casi más complicado, pero también hay manera de hacerlo. Podemos pedirle que nos lleve en su automóvil hasta la Sala, y así podrá ver a las personas que ingresan al salón, confirmando con sus propios ojos que no sólo son mujeres, sino también hombres de todas las edades. Y, claro está, el tema de los premios también es un motivo de peso: quizás, al comentarle los premios de dinero en efectivo, de viajes, de bebidas y alimentos, de cupones para cenas en restaurantes y de tantos otros tipos que podría ganar, se convenza de darle la oportunidad a este grandioso juego, y encontraremos así a un compañero ideal para la práctica.